Que la mayor parte de los medios de difusión mundial estén todavía comentando con sarcasmo la disparatada (y peligrosa) intervención de Donald Trump en la Asamblea General de la ONU, evidencia uno de los grandes contrasentidos de este instante para la humanidad. Decía el presidente francés Enmanuel Macron que todo se estaba convirtiendo en una especie de showplanetario. Fue una referencia a lo expuesto por el gobernante norteamericano, quien, a su vez, tan campanudo, dijo haberse propuesto provocar la risotada (en realidad espontánea, dados sus petulantes disparates) de un auditorio por lo general serio.